Nicaragua expresa su preocupación porque Colombia no acepta el fallo de la CIJ
El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, expresó hoy su preocupación por la posición de su homólogo colombiano, Juan Manuel Santos, que anunció que su Gobierno no acepta el fallo definitivo de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya sobre un litigio de límites marítimos en el Caribe.
Es un acto que muestra irrespeto total al derecho internacional, a la Corte, al pueblo colombiano, al mismo Estado colombiano, y se está irrespetando el mismo presidente, porque él había comprometido la palabra a su propio pueblo. Palabra que se compromete, palabra que se cumple. Esto nos preocupa", señaló Ortega en un mensaje a la nación.
En su mensaje, transmitido por cadena de radio y televisión, el mandatario dijo preocuparle el hecho de que Santos "rechaza lo que le conviene", pero no lo que beneficia a su país.
"Con todo respeto al presidente Santos, pero él no es autoridad suprema para venir a juzgar a la Corte en qué se equivocó y en qué no se equivocó", criticó.
"Es una falta de seriedad, de responsabilidad total", continuó Ortega, que pidió a Santos acatar la sentencia de la Corte, la que calificó de una "gran victoria" para Nicaragua, y, subrayó, que es inapelable.
"Espero que esto (posición de Santos) no sea más que un discurso del momento por el impacto que les ha provocado esta resolución, donde sencillamente se le está reconociendo a Nicaragua derechos que les habían usurpado", prosiguió Ortega.
Santos anunció hoy que su Gobierno no acepta el fallo proferido por la CIJ por considerar que ha incurrido en "graves errores" al trazar una nueva delimitación marítima entre su país y Nicaragua.
El tribunal internacional, con sede en La Haya, incurrió en "omisiones, errores, excesos, inconsistencias, que no podemos aceptar", aseveró Santos, al anunciar que Colombia "representada por su Jefe de Estado, rechaza enfáticamente ese aspecto del fallo que la Corte ha proferido en el día de hoy".
La CIJ redefinió este lunes la frontera marítima en el mar Caribe entre Colombia y Nicaragua, al conceder parcialmente a cada país algunas de sus reclamaciones.
Mientras que a Colombia le otorgó siete cayos en disputa pertenecientes al archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina, en el Caribe; a Nicaragua le otorgó más territorio marítimo en un área rica en pesca y recursos naturales.
Santos anunció que su Gobierno no descarta ningún recurso o mecanismo del derecho internacional para "para defender nuestros derechos".
"¿A dónde va a recurrir?, sólo que recurra a la Corte Celestial", matizó al respecto Ortega.
"Entonces, para qué fueron a la Corte, para qué admitieron a la Corte, si no se puede cumplir con lo que manda la Corte porque las leyes internas no lo permiten. La Corte obliga en todo caso a que las leyes internas se ajusten a lo inmediato para que den plena potestad al mandato de la Corte", explicó el mandatario.
Ortega dijo que su país libra sus "batallas" con la ley en la mano y recurriendo a los organismos internacionales.
Consideró que en este diferendo Nicaragua ganó entre un 75 a 80 % y el restante Colombia.
A los habitantes de San Andrés, Ortega les dijo que los siguen viendo como "nicaragüenses", y hasta le dio la "bienvenida" a Santos que anunció que pernoctará allí.
Aseguró que no les negarán el derecho a los sanandresanos a la pesca y que "encontrará una forma de tomar acuerdos para que", en base a la resolución de la Corte, "puedan continuar y seguir en sus labores de pesca, alimentando a sus familias y a sus comunidades".
Ortega brindó su mensaje acompañado por los expresidentes liberales Arnoldo Alemán (1997-2002) y Enrique Bolaños (2002-2007); Antonio Lacayo, un yerno de la exgobernante Violeta Chamorro (1990-1997), y varios excancilleres, entre ellos Eduardo Montealegre, un liberal crítico del gobernante.
Fuente Ultima Hora