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viernes, 21 de septiembre de 2012

Metroagua dice que ya no hay rebosamientos en el barrio Bastidas


La problemática de alcantarillado sanitario que se registraba en determinados sectores del barrio Bastidas, fue solucionada, según informó la Compañía del Acueducto y Alcantarillado Metropolitano de Santa Marta.

A través del Consorcio B.M.A., la empresa contrató los trabajos de rehabilitación del colector principal de alcantarillado sanitario en el sector comprendido entre la carrera 35 con calle 9C y carrera 32 con calle 10, del mencionado sector, localizado en el nororiente de la ciudad, los cuales beneficiarán a más de 15 mil personas, es decir 5 mil familias.

Allí de acuerdo con el concepto de funcionario de Metroagua que tuvo a su cargo el diseño y la interventoría de la obra, se rehabilitó un colector existente de 12 pulgadas, con tubería de 16 pulgadas en un área de 649 metros lineales.

Además se instalaron 12 pozos de inspección (manholes) que van a aliviar la tubería existente, para evitar los rebosamientos que se registraban en los alrededores del centro de salud, la iglesia, el colegio, inspección de policía y la estación de rebombeo, sitios donde los malos olores y los charcos imposibilitaban la convivencia y la movilidad.

Obras necesarias

La comunidad beneficiada con los trabajos realizados, además de la calidad de los mismos, destacó la celeridad con que Metroagua S.A. E.S.P. encaró la realización de ellos, financiados por el Distrito a un costo de 2.393 millones de pesos, con los cuales también se pagaron obras de alcantarillado sanitario en área cercanas al mercado público y el barrio Los Almendros.

"Las obras están bien, cumplen con las expectativas de la comunidad, que por causa de las aguas negras, la convivencia no era la mejor; además desmejoraba la calidad de vida de las familias que vivíamos en esta zona", dijo Carmen López Fontalvo, residente en el sector.

Igualmente, Rafael Barros Andrade, dirigente cívico y comunitario de Bastidas, no dudó en reconocer que con los trabajos anteriores donde fue decisivo la participación de Metroagua , se solucionó el 'dolor de cabeza' que el rebosamiento de aguas negras representaba para las familias que viven por los alrededores de la cancha de fútbol, el centro de salud, la iglesia, entre otros.

"Ahora puede llover en cualquier momento que en esos lugares no hay vertimiento. Es algo que nos complace porque mejoró la situación de muchas familias", precisó Barros Andrade.

Fuente el informador

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