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miércoles, 2 de mayo de 2012


"Colombia y la comunidad internacional exigen libertad de Langlois": Mindefensa



El ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, aseguró que hasta el momento no ha recibido ninguna notificación o información de que el frente 15 de las Farc tengan en su poder al periodista francés Roméo Langlois.
“Si es cierto que lo tienen secuestrado, tienen que liberarlo. El Gobierno y la comunidad internacional lo exigen”, precisó el ministro de Defensa, al señalar que el grupo armado debe proteger la vida del comunicador y entregarlo en el menor tiempo posible.
Pinzón defendió la decisión de las Fuerzas Militares de trasladar a Langlois al lugar donde se estaban adelantando actividades de radicación manual de cultivos ilícitos en el Caquetá.
“Los periodistas por su actividad profesional tienen toda la posibilidad de estar en al zonas más peligrosas para cumplir con su misión de informar a los ciudadanos, en ese sentido todas las organizaciones tienen el deber de respetarle su vida”, precisó el jefe de la cartera de Defensa. 
Pinzón fue claro en señalar que las tropas proteger al periodista galo le entregaron un chaleco y un casco, sin embargo estos eran de un color diferente a los que usan los soldados y personal de las Fuerzas Militares.
“Las Instituciones tienen la obligación de ofrecerle los mecanismos de protección a los periodistas. El Ministro señaló que cuando estaban llegando al lugar donde se estaba ejecutando la acción contra el narcotráfico el periodista tomó la decisión de quitarse los elementos que se le habían entregado, “él estaba exclusivamente vestido con sus prendas de civil”, precisó.
Según Pinzón, las Farc incumplieron su palabra de no volver a secuestrar. “Han pasado muy poquitos días después de esa declaración. Esto nos indica que existe una cohesión dentro de ese grupo guerrillero o si están ejecutando una forma de mentir sistemática”.
Por su parte, el vicepresidente Angelino Garzón afirmó  "ni el Estado ni la comunidad nacional e internacional, bajo ningún punto de vista, podemos aceptar que el periodista francés es un prisionero de guerra, es inadmisible. Además, la única arma que tenía era una cámara, que es su herramienta trabajo".
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